El envejecimiento es un proceso gradual y continuo de cambios naturales que empiezan en la adultez. Cuando alcanzamos la edad media temprana, muchas de las funciones del cuerpo humano empiezan a decaer gradualmente hasta cesar completamente.

Es el impacto del tiempo en el cuerpo humano, y por eso ocurre en múltiples niveles. Por ejemplo:

• Envejecimiento celular, el cual es causado por los radicales libres.
• Un descenso de los niveles hormonales.
• Daños a las células y tejidos del cuerpo, causados por elementos externos como contaminación, exposición a toxinas, mala alimentación, etc.

Durante años la ciencia se ha encargado de investigar métodos para lograr que estas funciones se mantengan al 100%. Es así, que ha encontrado en la Revitalización mediante Terapia Celular una alternativa a este gran enigma.

Las células madre están presentes en nuestro cuerpo a lo largo de nuestras vidas. Están altamente concentradas en nuestra etapa de embrión y a lo largo de la infancia, pero sus niveles caen abruptamente según vamos envejeciendo. 

Es así, que a una edad temprana, el cuerpo utiliza las células madre para nutrir el crecimiento de nuevas células y órganos. Más adelante, se utilizan como un sistema de reparación en el cuerpo, reparando las células dañadas o faltantes. La Célula Madre es una célula “genérica” que puede renovarse al hacer copias exactas de sí misma indefinidamente.

Las células madre son únicas porque pueden dividirse por la mitad, permaneciendo como una célula madre para su uso futuro. Además, al mismo tiempo, se convierten en una célula de reposición para cualquier tipo de tejido. Es decir, son células precursoras a partir de las cuales, las células maduras se desarrollan o diferencian y luego realizan funciones específicas en los tejidos y órganos del cuerpo.

Mediante nuestros implantes de células madre estimulamos la capacidad del organismo de producir células especializadas para casi todos los tejidos del cuerpo, tales como músculo cardíaco, tejido cerebral, tejido hepático, óseo, adiposo, etc.

Las células madre se encuentran en todos los humanos y permiten recuperarnos rápidamente de lesiones o enfermedades degenerativas. Así, trabajan activamente para ayudar a restaurar el cuerpo al dirigirse a las partes dañadas con el fin de repararlas. Sin embargo, a medida que envejecemos, la médula ósea disminuye la producción de células madre en cantidad y calidad. Por ello, las personas envejecidas tardan más en recuperarse de enfermedades o lesiones.

Así mismo, las células madre pueden convertirse en glóbulos rojos, células musculares, o incluso células cerebrales de acuerdo con la necesidad del cuerpo. Sin embargo, a medida que envejecemos, nuestros cuerpos no tienen la capacidad de regenerarse como solían hacerlo. Por eso, mediante la implementación de la terapia celular, en Clínica La Veró somos esencialmente capaces de revertir los efectos del envejecimiento.

Actualmente, las implantamos para tratar problemas de salud para los cuales no se encuentra una terapia adecuada.

Nuestra Terapia con Células Madre es aplicable también para tratar condiciones de salud crónicas. Además, es muy beneficiosa para mejorar el bienestar general de una persona.

Los mecanismos de acción terapéutica de las células madre ayudan a mejorar el estado de ánimo y los niveles de energía. Del mismo modo, favorecen la salud sexual y del sistema cardiovascular luego de los ataques cardíacos, refuerzan el sistema inmunológico, memoria, etc. Además, ayudan al cuerpo a sanar de forma natural, lo cual evita procedimientos invasivos.

Al mejorar las funciones corporales, nuestra terapia celular con células madre devuelve la vitalidad y agilidad mental. Al mismo tiempo, renueva la piel para lucir una apariencia más joven. Es por esto que, las células madre, son ideales para terapias anti-envejecimiento.

• Reduce el tiempo de curación.
• Alivia el dolor y la inflamación.
• Disminuye el daño nervioso.
• Aumenta la producción de Colágeno.
• Reduce la necesidad de cirugía.
• Genera nuevas células a nivel de corazón, vasos sanguíneos, músculo, hígado, hueso, cartílago y células cerebrales.

Primero, definamos el término “Revitalizar”: según el diccionario significa “dar más fuerza y vitalidad”. Y entre sus sinónimos tenemos los siguientes: vitalidad, reavivar, fortalecer y vigorizar.

Si logramos entender que nuestro organismo, compuesto por mente, espíritu y cuerpo, requiere revitalizarse mínimo cada seis meses, comprenderemos que es posible recuperar de manera integral nuestra juventud y mantenerla en un funcionamiento ideal, que cubre todos los sinónimos antes mencionados.

La medicina biológica, libre de efectos secundarios o tratamientos perjudiciales, nos ofrece revitalizarnos fácilmente gracias a la Revitalización Celular.

De esta forma, el propósito principal de la Revitalización Celular, es la restauración de la vitalidad de células y tejidos. Esto es, con el fin de devolverle al organismo, un funcionamiento óptimo a pesar del paso de los años.

La Revitalización Celular también fortalece sistemas como el inmune, nervioso, óseo o circulatorio. Además, reaviva los procesos regulares de los sistemas digestivo o renal, y vigoriza nuestra sexualidad.

Con todo esto, esta restauración de tipo integral logrará:

Un efecto estimulador y favorable del funcionamiento de los órganos.

Un equilibrio en la producción de las hormonas encargadas de revertir los estragos propios del envejecimiento.

Y aumentar la capacidad del sistema inmune, reduciendo la presencia de enfermedades así como el desarrollo de tejido maligno.

El objetivo principal de nuestra terapia con células madre es sin duda revitalizar órganos sanos y/o dañados. De tal forma, consigue optimizar la función de posibles cambios estructurales, especialmente aquellos a los que están predispuestos por la genética o la herencia.

La renovación de nuestra terapia celular tiene un efecto a medio y largo plazo, estimulando los mecanismos del cuerpo para su revitalización y recuperación. Como resultado, su efecto terapéutico mejora la calidad de vida en varios tipos de enfermedades degenerativas.

Además, nuestra Terapia de Revitalización con Células Madre:

• Renueva el sistema energético corporal.
• Estimula a órganos y tejidos involucrados.
• Renueva el ciclo vital de nutrición celular.

Por su parte, nuestros tratamientos integrativos de Revitalización Celular, son recomendados principalmente como terapias preventivas. También actúan como coadyuvantes en patologías degenerativas y del envejecimiento. Esto es debido a que estos trastornos comienzan en las células, mucho antes de que aparezcan los síntomas.

El objetivo de la medicina regenerativa que practicamos en Clínica La Veró es reemplazar los tejidos celulares perdidos o dañados a través de la terapia con células madre. Potencialmente, esto se puede lograr usando células madre pluripotentes o adultas directamente. Estas estrategias estan encaminadas a la generación de células madre sin tumorigenicidad ni inmunogenicidad, que son aptas para su aplicación clínica de prevención o cura de enfermedades.

Las células madres de Clínica La Veró, son células madre adultas pluripotenciales cultivadas a partir de los tejidos del cordón umbilical de neonatos sanos, con capacidad de regeneración celular.

Trasplantes de Células Madre Fetales Homólogas Histocompatibles con Baja Antigenicidad y alto contenido de ADN

Historia de los Trasplantes

El inicio histórico de la terapia celular se remonta al 15 de junio de 1667, cuando Jean-Baptiste Denys llevó a cabo la primera transfusión de sangre entre humanos.

En 1931, el cirujano suizo Dr. Paul Niehans introdujo el uso de células embrionarias específicas, extraídas de ovejas criadas bajo condiciones controladas, que se inyectaban de manera intramuscular. Estas células, provenientes de líneas específicas, buscaban fortalecer el sistema inmunológico y regenerar tejidos. En 1937, influenciado por el neurocirujano Harvey Williams Cushing, Niehans utilizó por primera vez células provenientes del hipotálamo y la hipófisis, extendiendo sus investigaciones al hígado, páncreas, riñones, corazón, timo y bazo. Estos trasplantes heterólogos sentaron las bases para explorar el potencial regenerativo de las células madre en órganos dañados. Sin embargo, la limitación era encontrar fuentes Y cantidades suficientes de células para trasplantar en una economía de trillones de células.

En la Clínica la Veró desde 2008, en nuestro laboratorio especializado con equipos avanzados (cámaras de bioseguridad, centrífugas en frío, incubadoras y liofilizadores) emprendimos investigaciones para desarrollar cultivos de células madre fetales homólogas. Nuestro equipo multidisciplinario, liderado por el Dr. Aurelio Espínola (Médico) y el Dr. Freddy Insfrán (Bioquímico-Farmacéutico) con la participación de especialistas en genética, bioquímica y biología, logró aislar y cultivar células madre hematopoyéticas y mesenquimales provenientes de cordones umbilicales.

Tomamos como gran desafío encontrar células madres pluripotenciales con baja antigenicidad que pudiera convertirse en los 200 tipos celulares diferenciados de un adulto. Y de esa forma se inició el estudio del cordón umbilical y de la placenta humana, habitualmente desechos biológicos en las maternidades.

Fueron recolectados 1000 muestras y transportados al laboratorio con transportador de órganos, encontrándose en promedio entre 80 a 120 millones de células madres; el del menor número fue de 15 millones y el de mayor numero fue de 180 millones. Unas muestras no serían suficientes para una dosis diseñada de 1 billon-1 billón 600 millones y para áreas localizadas 50-100-200-300 millones.

En 10 años (2018) se logró superar las dificultades del cultivo de células madres humanas extraídas del cordón umbilical.

Se inicio su utilización sistémica para insuficiencia renal, insuficiencia cardiaca, enfermedad de Parkinson, Alzheimer, demencias, diabetes tipo ll, con resultados iniciales prometedores; reversión de signos y síntomas de la Enfermedad.

Avances en Biología y Genética

El siglo XX trajo consigo el desciframiento completo del genoma humano, lo que permitió avances en la comprensión de la genética y la epigenética. Descubrimientos sobre los telómeros, genes y el ARN llevaron a una mayor precisión en el análisis de identidades genéticas y la herencia. Con los conocimientos adquiridos se creyó falsamente que se podría predecir, tratar y curar las enfermedades, sin embargo, también quedó claro que las influencias ambientales, tanto externas como internas (denominadas epigenéticas), tienen un papel crucial en la expresión genética y en desarrollo de las enfermedades.

Siglo XXI: Descubrimiento del microbioma.

La identificación del rol funcional de las microbiotas y su genoma asociado, el microbioma, destacó su influencia en la inmunomodulación en el sistema de defensas adquiridas, producción de vitaminas y absorción de nutrientes esenciales con gran impacto en el crecimiento, desarrollo y mantenimiento humano.

Electroma

Después de la década del año 2000, la comprensión funcional que los iones de sodio, potasio, magnesio, zinc, calcio en la producción de la electricidad celular y que al desequilibrar estos iones las células pierden voltajes y se enferman; las células funcionan como micro baterías en el cuerpo.

Experimentos y Usos

El banco de células madres actual de la Clínica cuenta con lotes de 300 millones, un billón y un billón seiscientas mil células madre liofilizadas, listas para usos clínicos. Estas células han demostrado eficacia en la regeneración de articulaciones dañadas, tratamiento de enfermedades crónicas no transmisibles (artrosis, diabetes tipo 2, Parkinson, insuficiencia cardíaca y renal), y en el manejo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

Durante la pandemia de COVID-19, se emplearon células madre fetales hematopoyéticas para tratar enfermedades infecciosas agudas con reacciones inmunológicas de índole autoinmune, logrando revertir esta condición en tres semanas.

Protocolo Clínico en Medicina Integrativa

En la clínica La Veró, se siguen estrictos protocolos para trasplantes de células madre:

1. Evaluación del estado de salud del paciente: Se realiza un diagnóstico integral, evaluando el pH, oxigenación, niveles de vitaminas, oligoelementos, hormonas y minerales.

2. Corrección de desequilibrios: Antes del trasplante, se estabilizan las condiciones metabólicas del paciente, ya que un ambiente ácido o hipóxico puede comprometer la eficacia del trasplante.

PROHIBIDO TRASPLANTAR CÉLULAS MADRE PLURIPOTENCIALES EN CONDICIONES DE ÁCIDEZ E HIPOXIA

Está estrictamente prohibido trasplantar células madre pluripotenciales a un huésped que presente acidez corporal, hipoxia o un desequilibrio de iones (déficit o exceso). Esta prohibición se fundamenta en el descubrimiento del Dr. Otto Warburg, galardonado con el Premio Nobel de Medicina en 1931, quien demostró que:

“Todas las formas de cáncer, especialmente las localizadas en su entorno, presentan una alta concentración de protones de hidrógeno (pH ácido) debido al uso de la glicólisis seguida de la fermentación láctica como fuente de energía de las células cancerosas.”

En un medio ambiente ácido e hipóxico, existe el riesgo crítico de que las células madre pluripotenciales, debido a su capacidad de adaptarse al ambiente, se desarrollen como células malignas (cancerígenas). La epigenética juega un rol determinante en este proceso.

Por lo tanto, es obligatorio realizar un diagnóstico exhaustivo para garantizar que el huésped no presente estas condiciones antes de proceder con cualquier trasplante de células madre pluripotenciales. La seguridad y eficacia del procedimiento dependen de un entorno biológico adecuado.

Conclusiones y Perspectivas

Las células madre fetales homólogas, obtenidas bajo estrictas condiciones de bioseguridad y procesadas para optimizar su potencial pluripotencial, representan una herramienta clave en la medicina regenerativa y antienvejecimiento. Su capacidad para diferenciarse en más de 200 tipos celulares, incluida la regeneración neuronal, y su uso en enfermedades crónicas y degenerativas han abierto nuevas posibilidades terapéuticas. Sin embargo, su aplicación requiere una preparación meticulosa del paciente y un entorno biológico adecuado para maximizar los beneficios y minimizar riesgos.

El enfoque holístico de la medicina integrativa, que incluye epigenética, microbiota y balance metabólico, garantiza una base sólida para el éxito de estos trasplantes.